"Un Encuentro de tres visiones con una misma pasión"

 Hoy vamos a recorrer la Ruta del diseño, para descubrir quienes fueron los tres grandes arquitectos que trabajaron en una misma oficina de arquitectura.

 Y llegamos a La ciudad de Berlín, en la Alemania que se disputaba el centro de la tecnología industrial y las artes en Europa. Pero con la presión de una guerra que pronto estallara en toda Europa y el mundo.

Era Berlín, 1910 y buscamos el Estudio de Arquitectura de Peter Behrens, uno de los más importantes de Alemania, que tenía como característica especial unir el arte con la industria. En otras palabras, era el nacimiento de la identidad corporativa de las empresas, dicho estudio estaba dividido en dos sectores el de los arquitectos técnicos y de los artistas, una de las causas que motivaban a cualquier aprendiz a querer trabajar allí. 

Así es como en los próximos 4 años formaron parte de ella: Le-Corbusier, Mies van der Rohe y Walter Gropius. Y si no hubiese estado muy ocupado, y además de por no tener conocimiento del lenguaje alemán, hubiese estado también Frank louis Wright, ya que para ese entonces estaba en Berlín, conociendo la ciudad pujante de las grandes industrias.

Le-Corbusier, creador del Racionalismo en la Arquitectura, basado en la siguiente premisa: “todo componente funcional debe estar destinado para vivir”. Y el modulor, donde las proporciones de la de las edificaciones y los espacios deben tener relación directa con el hombre.

Mies van der Rohe, uno de los padres de la Arquitectura moderna, resume toda su creación arquitectónica en las citas célebres: “menos es más” y “Dios está en los detalles”, usando para ello 2 elementos básicos y característicos en sus diseños como el acero y el vidrio.

Walter Gropius, su pasión por la técnica y la arquitectura lo llevaría a ser un personaje emblemático a comienzos del siglo XX. conjugando el estilo industrial con las artes plásticas, siendo director fundador de la Bauhaus, la escuela de arte más influyente de Europa, donde se fomentó la integración de edificios, mobiliarios y accesorios con las técnicas de orfebrería usadas por años atrás en la humanidad. Y completó su aporte intelectual desarrollando diseños urbanos a su larga carrera profesional.  

Cada uno con un sueño, y dejar huella en lo que les apasionaba, crear una forma distinta de construir los nuevos edificios. Era el nacimiento de la Arquitectura moderna del siglo XX.

 Quien diría que años más tarde estos novatos del conocimiento del diseño que llegaron para aprender en este estudio de Behrens, serían los que cambiarían los principios de la arquitectura mundial, con sus aciertos y errores, mucho los pueden criticar, pero lo que no pueden es ignorar que han influido en los valores más representativos de las creaciones arquitectónicas, desde ese momento hasta nuestros días.